Las bebidas energéticas vuelven a la palestra

Esta semana hemos conocido la noticia sobre la denuncia a la conocida marca de bebidas energéticas Red Bull, por la cual se les sentenciaba a indemnizar a sus consumidores debido a su falsa publicidad, ya que Red Bull «no les daba alas» como rezaba el spot, a lo que tendrán que pagar 10 euros a todo aquel que denuncie y demuestre su consumo. Pero es ahora cuando más se está hablando de ellas, aunque es algo que siempre se ha comentado, las bebidas energéticas son peligrosas para la salud.

En la última década éste tipo de bebidas se han convertido en parte fundamental, por desgracia, de la vida de las personas aunque se empezaron a vender cómo bebidas energéticas para el deporte, pasando a ser ingeridas mezcladas con alcohol ya que hacen mantener despiertas a sus consumidores debido a los ingredientes que lleva. Es ahora cuando la Organización Mundial de la Salud, nos advierte que su consumo puede suponernos un problema para nuestra salud. Los riesgos provienen principalmente debido al alto porcentaje de cafeína que contienen, eso sin haber estudiado las adversidades de la taurina aún, dicha sobredosis de cafeína puede producir en el individuo palpitaciones, hipertensión, convulsiones y en algunas ocasiones la muerte, como ya ha ocurrido.

El problema se acrecenta, como ya hemos comentado antes, cuando se mezcla con alcohol, ya que según Según la EFSA, el 70% de los jóvenes de entre 18 y 29 años toma ese tipo de bebidas cuando sale por la noche, lo que les produce una falsa sensación de resistencia al alcohol lo que les hace consumir más. Bebidas energéticas que siempre están en la palestra y en los estudios científicos pero que al no haberse probado que sean 100% dañinas para el ser humano, se siguen comercializando.