En ocasiones, por estos lares ya os hemos hablado del turismo de compras. Es una acción al alza que gana adeptos, especialmente en aquellos que se lo pueden permitir. Ir a una ciudad a algo más que ver monumentos o estar en la playa. El turista de compras busca la variedad de comercios para ‘enriquecer’ su alma y sus ansias de capitalismo, de tal forma que acaba ‘quemando’ la tarjeta de crédito y con un montón de bolsas con nuevos artilugios para su vida diaria, o no.
Según el último informe de ESADE, Barcelona es la gran ciudad en la que el gasto medio de los turistas por ciudad es más elevado entre las cinco ciudades analizadas: la citada Ciudad Condal, Londres, París, Amsterdam y Roma. En total, Barcelona tiene un gasto medio de 1.060$, siendo el 34% lo gastado en shopping. Por su parte, Londres tiene un gasto medio por turista de 1025$, lo que representa el 28,3% en turismo de compras. En París, los turistas nos dejamos 1.050$ de media, representando el 23,5% del total en turismo de compras (seguido, por orden, de alojamiento, comida y bebida, y ocio y cultura en último lugar). Amsterdam y Roma quedan lejos de esas cifras, con números por debajo de los 1.000$ medios y con porcentajes por debajo del 20%, cogiendo mayor importancia en ambos casos el sector de la comida y la bebida, los grandes fuertes de las capitales italiana y holandesa.
Respecto al tipo de turista, entre los no europeos destacan los asiáticos, que representan el 21% de los visitantes y el 40% de las ventas totales. El gasto medio de los no europeos es de 295€, siendo japoness, norteamericanos, coreanos y chinops los ciudadanos que más gastan.
Por su parte, en el lado europeo, alemanes, franceses, británicos e italianos son los que más dinero se dejan en el turismo de compras.